Hoy platiqué conmigo en la regadera
y por primera vez no me hablé de tí
ni me hablé de sentir
me dí cuenta de que no valgo por estar al lado de alguien
sino por lo que soy
que no es necesario que siga flagelándome
que si las cosas han de ser, seran.
Hoy revolví el cajón de los recuerdos
y encontré pedacitos de mi pasado
tristes, alegres pero al fin y al cabo pasados.
Hoy caminé conmigo por el parque
y ya no estaba nadie mas
ya no iba la sombra
ya me sientía libre
sin esa carga que venía arrastrando.
Hoy me invité a tomar un café
y disfruté de un buen libro y un cigarro
ya no pensé en tí, ni en el de antes, ni en ninguno
era solamente yo conmigo.
Hoy me acostaré
sólo yo
sin los fantasmas que me acompañaban
y con una sonrisa.
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1 comentario:
Excelente texto!
Entras en la regadera escoltado por lo recabado durante las hrs diurnas, para deshacerte de ellas y mirarlas irse por la coladera...
Chido!!
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